En Copenhagen hay varios sitios que visitar, y uno de ellos son los museos, de los cuales vamos a hacer un breve recuento aquí.

Para empezar, tenemos el Museo de Amalienborg, ubicado dentro del Palacio de Amalienborg, que está compuesto a su vez, por cuatro edificios que datan ya de 1750 y 1754, y se convirtieron en la casa de la familia real tiempo después. En la parte del museo donde se exhibe la historia de la familia real danesa, se pueden ver sus hitos más importantes hasta los tiempos modernos. Entre las partes más impactantes esta el Salón de la Reina Luisa de 1895, el estudio de Frederick IX y la Sala de Oro, donde se muestran todas las joyas de la Corona.

El Museo de Ámbar de Copenhagen muestra obras de arte, joyas y extrañas piedras de ámbar que contienen en su interior insectos prehistóricos y plantas. Aquí se encuentra el trozo más grande de ámbar del mundo, que pesa 8,8 kilos. En el primer piso hay una tienda muy elegante, que ofrece joyas de esta piedra. Según he sabido, las piedras que contienen insectos o objetos en su interior, son mucho más valiosas que aquellas que no tienen nada, así que apúntenlo para cuando adquieran alguna joya de ámbar.

Otro museo que vale la pena visitar, es el Museo de Arte Moderno Arken, que es bastante reciente, ya que fue inaugurado el año 1996. El museo se encuentra en la playa de Koge como un barco varado enorme. Todos los años se muestran exposiciones de nivel internacional. Este ha sido uno de los museos más caros para Dinamarca, al menos realizado durante el siglo XX en materia de cultura.

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