Conocida en idioma sueco como “Kungliga Vetenskapsakademien”, la Real Academia de las Ciencias de Suecia es una de las instituciones más prestigiosas en su tipo en todo el territorio europeo, y su trascendencia es tal que muchos de los turistas que se acercan allí para recorrerla internamente, o al menos fotografiarse en la puerta, ya que se trata de uno de los símbolos del país.
Ubicada en Estocolmo, la capital sueca, esta institución fue creada en el año 1739 por el rey Federico I, siendo una de las tantas Academias Reales de Suecia. En cuanto a su configuración actual, se trata de una organización independiente, cuyas actuaciones están encaminadas a promover las ciencias, especialmente Ciencias Naturales y las Matemáticas.
Sin embargo, las competencias de este recinto se han extendido mucho más en los últimos años, al punto de que hoy en día los comités de la Academia también actúan como tribunal de selección para el Premio Nobel en Física, en Química, y en Ciencias Económicas, motivo por el cual todos los años se centra una gran atención en este espacio educativo sueco.
Finalmente, hay que destacar que para aquellas personas que hayan visitado Londres o Paris, habrán encontrado que la Real Academia de las Ciencias de Suecia se asemeja mucho a la de la “Real Sociedad”, en suelo inglés, y su par ubicada en la capital francesa. Esto se debe, en buena parte, a que en el momento de su creación, muchos de los familiares de estas otras instituciones estaban involucrados en el proyecto.
Vía: El Comercio
Imagen: Britannica