El Hotel de Hielo que está en la Laponia Sueca, ha tenido un gran éxito desde su inauguración. Aunque uno crea que está completamente apartado de la civilización, no es tan así, ya que el pueblo de Jukkasjärvi está a unos 125 kilómetros al norte del Círculo Polar Ártico. En este poblado hay unos 900 habitantes y 1.000 perros.
Para los veranos, llegan visitantes para practicar rafting, paseos y otras actividades al aire fresco, y aunque en invierno las temperaturas caigan al mínimo, la gente llega igual.
Antes que estuviera el Hotel de Hielo, había pocos turistas y los pocos que había, eran distantes. Entonces al empresario local Yngve Bergqvist tuvo una idea, y inspirado en la escultura de hielo japonés, en 1989 organizo un taller donde algunos artistas pudieran mostrar sus creaciones dentro de un iglú. La casa de hielo se fue utilizando para otros eventos y al cabo de un año la gente ya quería quedarse a alojar en el lugar.
La gente quedo encantada con la idea de un hotel de hielo, y así nació el Ice Hotel. Cada año, este hotel tiene entre 50.000 y 60.000 visitantes, y entre los invitados, ha estado incluso la familia real sueca. En la capilla de hielo se han celebrado bodas y más de veinte mil bautismos al año. Cada año se producen un millón de vasos de hielo y se envían a todo el mundo. Para qué decir la cantidad de vodkas que se han bebido en el bar del Ice Hotel.
Este hotel fue el primero en su tipo en el mundo, y es el más grande también. Ahora hay varios otros emergiendo, que además son más baratos que alojar en esta versión sueca original. Aquí nada es muy barato que digamos.
Dormir dentro del Hotel de Hielo significa mucho más que estar dentro de un iglú caro. Para crear las habitaciones, el hielo pasa por varias etapas de preparación, y quienes construyen, están bien comprometidos con cada proyecto con forma de iglú, así como las esculturas que hay que hacer en noviembre.
Las camas de hielo están sobre un marco de madera cubierto con un colchón de pieles de renos. En lugar de puerta hay una cortina. Las 16 Art Suites, son temáticas, decoradas con esculturas de hielo y una iluminación imaginativa. Este año la novedad fueron los diseños que prendieron con todo en la Suites Northern Lights.
En el Huskysledding se puede disfrutar de comidas ricas, como el carpaccio de alce marinado con trufa. Hay actividades como la pesca en el hielo y paseos en trineo, tirados por perros.Todo un panorama perfecto para los que puedan pagar por estar aquí.
Vía/ Dailymail